La Fundación Mexicana para la Dermatología, A. C. recomienda se realice por lo menos 3 veces al año un autoexamen de piel para reconocer signos sospechosos del padecimiento. Es importante observar detenidamente todas las partes de su cuerpo. Cuanto mejor conozca su piel, más fácil será para usted saber reconocer nuevas manchas pigmentadas o cambios en sus lunares.
Como ayuda, la regla “ABCDE” le permitirá memorizar los signos que deben alertarlo:
A como Asimetría: forma no circular, con dos mitades que no se parecen.
B como Bordes irregulares: bordes irregulares, mal delimitados, a veces con extensión del pigmento sobre la piel alrededor de la mancha.
C como Color no homogéneo: presencia de varios colores (negro, azul, café, rojo o blanco).
D como Diámetro: diámetro en aumento, en general superior a los 6 mm
E como Evolución: cualquier mancha pigmentada que cambia de aspecto rápidamente (forma, tamaño, espesor, color) debe constituir una señal de alarma.
La presencia de uno o más de estos criterios no significa que usted tenga cáncer, pero tampoco debe ser ignorada: a la más mínima duda, consulte a su dermatólogo sin esperar.
Así mismo, la autoexploración cutánea periódica es imprescindible para detectar a tiempo cualquier lesión sospechosa de cáncer de piel. Es fácil realizarla, solo ante un espejo, o con la ayuda de un familiar, respetando la regla del “ABCDE” descrita más arriba y siguiendo los siguientes pasos:
Paso 1: Su cuerpo con los brazos levantados, de frente y de espaldas a un espejo y a los lados.
Paso 2: Los antebrazos, la parte superior e inferior de los brazos, las palmas de las manos.
Paso 3: La parte posterior de las piernas, los espacios entre los dedos de los pies, la planta de los pies y los genitales.
Paso 4: detrás del cuello y el cuero cabelludo, raya por raya, con un espejo de mano.
Paso 5: la parte inferior de la espalda y las nalgas.
Crédito: Imágenes cortesía Laboratorios Avéne