Hiperhidrosis: Exceso de sudoración

Hiperhidrosis: Exceso de sudoración

El exceso de sudoración puede vincularse con enfermedades sistémicas como obesidad, menopausia, hipertiroidismo, hipoglucemia, infecciones, linfoma, diabetes con neuropatía diabética; así como por el uso de sustancias como hipoglucemiantes orales, antidepresivos, antiinflamatorios, cafeína, arsénico, entre otros.

El sudor es necesario para controlar la temperatura corporal, pero cuando aparece de forma excesiva se dice que existe Hiperhidrosis.

El efecto de la Hiperhidrosis puede afectar principalmente axilas, palmas de las manos y plantas de los pies. En ocasiones repercute también en el rostro y la espalda.

Algunos pacientes ven afectada de manera negativa su apariencia física, así como sus relaciones sociales o laborales. Por ejemplo: manchar la ropa al nivel de las axilas, humedecer la mano de otros a través del saludo, afectar las características de mercancías delicadas, papelería, componentes electrónicos o metales, ya que su manejo con la sudoración de las manos en algunos casos les llega a modificar.

La Hiperhidrosis es más frecuente en climas cálidos, aunque puede manifestarse también entre la población de lugares fríos, sin importar género y ocupación. No obstante son las mujeres quienes acuden con más frecuencia a consulta por este motivo. Se dice que del 75 al 80 por ciento de los pacientes cuentan con historia familiar de Hiperhidrosis, lo que supone existe una predisposición hereditaria.

Existen algunos tratamientos para evitar el exceso de sudoración los cuales deben ser administrados únicamente por el dermatólogo, tales como: antiprespirantes, sales, anticolinérgicos (con efectos adversos en otros niveles del organismo). Sin embargo, la dermatóloga explicó que el tratamiento más solicitado y efectivo suele ser la aplicación de toxina botulínica tipo A.

Puede recurrirse también a procedimientos quirúrgicos los cuales únicamente debe realizarlos un cirujano plástico o neurocirujano, donde el paciente debe exigir la certificación correspondiente para evitar riesgos negativos en su salud.

Los mitos más comunes respecto a la Hiperhidrosis tienen que ver con que se trata de una enfermedad de gente sucia y que no se baña. Lo cual es mentira.

La Fundación Mexicana para la Dermatología , A. C.; alerta a la población para que evite el uso de remedios caseros como limón o baño con jabones de lavado para ropa, ya que pueden provocarse una dermatitis por contacto.

Para comentar:

  • El sudor esta regulado por el sistema nervioso simpático. A través de éste se envían señales a las glándulas sudoríparas ecrinas para secretarlo
  • Se dice que el estímulo de las glándulas sudoríparas se puede iniciar cuando aumenta la temperatura 1.5 grados centígrados en el cuerpo.
  • La sudoración de palmas y platas inicia en edades muy tempranas, continúa a través de la vida y disminuye con el paso de los años.
Compartir:

Comentarios desactivados.